El PIB de México perdió un 0,7% interanual en el segundo trimestre, bajando muy negativamente desde el alza del 1,2% en el primer trimestre, dijo hoy la oficina de estadísticas del país (Inegi). No obstante, se esperaba el retroceso, dado un efecto estacional adverso.
El deterioro se produjo principalmente por el sector industrial, que cayó un 2,8% interanual durante el trimestre. Aunque todavía no hay información sobre el desempeño de industrias particulares, es probable que este deterioro haya sido consecuencia de la caída de la industria minera, luego de la crisis de la industria petrolera y del débil comportamiento de la construcción, así como la débil inversión pública en infraestructura.
El sector de servicios también se estancó en el segundo trimestre, según la estimación preliminar, debilitándose rápidamente desde el aumento de 1.9% registrado en el primer trimestre. Esta es la cuarta desaceleración consecutiva, en un retroceso drástico. Esto es consistente con la desaceleración del mercado laboral vista desde finales de 2018, parcialmente creciente por las políticas poco sólidas del gobierno de Andrés Manuel López Obrador y su impacto desde antes de asumir el cargo.
El débil aumento del PIB del 0,3% en términos reales, en el primer semestre, sigue mostrando un grave estancamiento que contrasta con las sólidas expectativas de crecimiento mantenidas a lo largo de 2018 para este año. Esto consolida la expectativa de un crecimiento inferior al 1.0% durante 2019, como lo anticipa el consenso del mercado y se explica principalmente por las políticas económicas poco sólidas del gobierno, que han retrasado la inversión y han obstaculizado la demanda privada.
(Reporte especial de CEE Market Watch para Valora Analitik)
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