El producto interno bruto (PIB) de Reino Unido cayó 0,1 % en el segundo trimestre de 2022, informó este viernes la Oficina de Nacional de Estadísticas (ONS).
Es de recordar que en el primer trimestre del año la economía británica creció 0,8 %. Lea más en noticias económicas internacionales.
De acuerdo con la primera estimación realizada por la entidad, en términos de producción, los servicios cayeron 0,4% en el segundo periodo abril-junio de 2022, siendo las actividades de salud humana y trabajo social que tuvieron la mayor contribución negativa, reflejando una reducción en las actividades relacionadas con la Covid-19.
“Hubo contribuciones positivas de los servicios orientados al consumidor, como otras actividades de servicios (a las agencias de viajes y operadores turísticos les fue particularmente bien cuando las restricciones de la Covid-19 se relajaron en la industria del turismo), las actividades de servicios de alojamiento y comida, y las actividades artísticas, de entretenimiento y recreativas”, indicó la oficina británica.
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La ONS indicó que en el segundo trimestre se evidenció un descenso en el consumo real de los hogares del 0,2 %, el cual fue compensado por una contribución positiva del comercio neto.
Pese a lo anterior, la entidad sigue “recomendando precaución debido a los cambios recientes en la recopilación de datos que afectan los flujos comerciales de la Unión Europea”.
En la variación mensual, el PIB de Reino Unido cayó un 0,6 % en junio de 2022, luego de un aumento revisado a la baja del 0,4 % en mayo.
“El Jubileo de Platino y la mudanza del feriado bancario de mayo llevaron a un día hábil adicional en mayo de 2022 y dos días hábiles menos en junio de 2022, aunque esto impactó en el PIB mensual, hubo poco impacto en las estimaciones trimestrales”, explicó la ONS.
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Comparado con el mismo trimestre del año anterior, la Oficina de Nacional de Estadísticas de Reino Unido indicó que el deflactor implícito del PIB aumentó un 6,0 %, reflejando principalmente el aumento del 7,3 % en el precio del gasto de consumo de los hogares, “que es la tasa de crecimiento anual más rápida del deflactor de los hogares desde 1991”.
