Diciembre y sus festividades en Colombia trae celebraciones que implican unión familiar, reencuentros de amigos y felicidad, pero también alcohol, excesos, violencia y mal uso de pólvora.
Desde el 7 de diciembre, el día de Velitas, en Navidad y hasta Año Nuevo, son muchas las familias que optan por buscar la manera de conseguir productos pirotécnicos a pesar de que se busca su regulación por el mal uso y sus consecuencias.
El Instituto Nacional de Salud (INS) reportó el pasado 11 de diciembre un total de 255 casos de lesionados por el empleo inadecuado de estos productos, lo que representa una disminución de 15,56 % comparado con 2021.
El instituto detalló cuáles fueron los departamentos en donde se presentaron más lesionados: Bogotá con 37, Antioquia reportó 30, en Cauca hubo 15, en Magdalena 13 y en Atlántico 12.
A pesar de que el Gobierno Petro expidió el decreto que reglamenta la fabricación, comercialización y manipulación ilegal de la pólvora en Colombia en las leyes 670 de 2022 y 2224 de 2022, se sigue adquiriendo en locales de nombre como El Vaquero y otros más discretos en ciudades y pueblos.
En el documento se estipula una sanción entre uno y 200 salarios mínimos para toda “persona natural o jurídica que use, fabrique, manipule, transporte, almacene, comercialice, compre o venda pólvora, artículos pirotécnicos o fuegos artificiales y globos” de manera ilegal.
Además, contempla una multa de 100 a 300 salarios si “se afecta la vida y la integridad de terceros, o de bienes públicos o privados”.
¿Cuántas personas usan pólvora en diciembre?
A pesar de que la pólvora no está prohibida, su comercialización es ilegal y por ello se ha vuelto un dilema adquirirla, en especial para las fechas de fin de año en la se convirte en uno de los hechos sobre los que se enfoca la atención cada 25 de diciembre y 1 de enero.
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Pues desde la alcaldía de Mockus en Bogotá en 1995 se expidió el Decreto Distrital 791 para que comerciantes de este producto entregaran todo a las autoridades y se penalizara el transporte y distribución de tortas o volcanes, culebras, chispas mariposas, totes, voladores y demás productos pirotécnicos.
De acuerdo con Carolina Carvajal, gerente general de El Vaquero “se clasifica en tres categorías de las que sólo los productos de las dos primeras pueden usarse sin restricciones: luces de bengala que generan un impacto visual. Volcanes de pólvora fría, inofensivos a un metro de distancia. Son cerca de diez referencias que resultan seguras para cualquier adulto”.
El Vaquero fabrica sus propios productos y es avalado como una empresa legal para vender y distribuir este tipo de artículos, también vende la pólvora que se usa para eventos deportivos, conciertos y en citas que se organizan en plazas públicas de ciudades y municipios.
Allí los precios varían dependiendo el producto y la cantidad de “estalladas” que tendrá.
“Allí más o menos yo llevo $400.000 cada vez que voy a adquirir pólvora, eso es según los productos que uno compre, hay una sola torta que vale $500.000, pero otros vienen desde $30.000 a $90.000.
La torta que yo compro es de 30 tiros o 20, una pequeña de 15 tiros vale por ahí $30.000” expresó Henry Giraldo, comprador recurrente de este comercio.
Por otro lado, en tiendas de barrio se pueden conseguir los productos a precios más económicos, por ejemplo, cohetes a $15.000, totes a $5.000 y hasta menos, por ello es fácil acceder a estos artículos en diciembre y otros meses donde hay ocasión para celebrar eventos.
“Este es un tema que no es menor y que le corresponde a los adultos tener responsabilidad, no podemos ni siquiera echar totes, ni chispitas, mucho menos los voladores.
Recordemos que un accidente de estos es muy grave, las consecuencias son nefastas para el sector salud, para todo el sistema, pues las partes más afectadas en los niños son la cara, los ojitos, la nariz, los oídos y las manos”, comentó Giovanny Rubiano, director del INS a Blu Radio.
