En su informe mensual cambiario, el equipo de Investigaciones Económicas del Banco Agrario de Colombia destacó su expectativa para que la tasa de cambio local oscile entre $3.150 y $3.200 en lo que resta del segundo trimestre de 2019.
Esto en la medida que la depreciación de otras monedas fuertes siga siendo elevada, que la economía de EE. UU. mantenga un ritmo de expansión superior al del resto de economías desarrolladas, así como que la demanda especulativa de dólares permanezca alta, resaltó la entidad.
La tasa de cambio local mostró estabilidad entre marzo y abril, pero permaneció por encima de los $3.100, en línea con la fortaleza relativa del dólar a nivel internacional. A su vez, todas las medidas de dispersión del dólar en el mercado local descendieron y se sitúan en mínimos de un año.
Del mismo modo, la volatilidad en los mercados de divisas continúa con una tendencia descendente en lo corrido de 2019 y se sitúa en mínimos de cinco años. La postura más acomodaticia por parte de los principales bancos centrales del mundo ha calmado a los mercados y los niveles de aversión al riesgo han descendido.
En Latinoamérica, la fuerza revaluacionista de principios de año se ha diluido entre marzo y abril, concluyó el Banco Agrario de Colombia.
