El último capítulo de la tecnológica japonesa en el mercado de computadores portátiles se empezó a escribir en 2018, cuando tuvo una temporada de ventas decepcionantes.
Desde 1985 la compañía nipona empezó a fabricar los laptops que años más tarde se convertirían en su producto insignia. La empresa se retirará para siempre este año cuando termine de transferir sus acciones en el negocio a Sharp, grupo que adquirió la fabricación de los portátiles Toshiba.
Muchos usuarios de Toshiba tendrán muy pronto laptops que se volverán piezas de colección, señala un informe de Yahoo Finance. Toshiba se atribuye la distinción de haber sido el primero en producir una computadora portátil en el ahora estándar formato de clamshell, la presentación que une la pantalla con el teclado por medio de una bisagra, para el mercado de gran escala.
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La marca de tecnología decidió en 2018 vender el 80,1 % de las acciones de Toshiba Client Solutions por US$ 36 millones a Sharp Corporation. Fue tras concretar la transferencia en octubre de ese año, que sus laptops comenzaron a ser comercializados bajo el apelativo de Dynabook, un nombre que Toshiba había usado previamente en Japón bajo la batuta de Sharp.
El 19,9 % restante que poseía Toshiba fue adquirido por Sharp el pasado 30 de junio de este año, por lo que Sharp pasó a controlar todo el negocio de ordenadores portátiles. Toshiba seguirá explorando sus opciones en tecnología, ya que recientemente invirtió US$ 300 millones en un nuevo centro de investigación en inteligencia artificial.
(Con información de Yahoo Finance)