Depresión y ansiedad laboral cuestan US$1 billón en pérdida de productividad

La preocupación por el bienestar laboral fue una de las consecuencias que dejó la pandemia en el campo del trabajo. Hoy, tanto las compañías como los empleados no solo lo consideran como un elemento muy relevante, sino también se preocupan por promoverlo.

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La preocupación por el bienestar laboral fue una de las consecuencias que dejó la pandemia en el campo del trabajo. Hoy, tanto las compañías como los empleados no solo lo consideran como un elemento muy relevante, sino también se preocupan por promoverlo.

Según el informe global de bienestar de AON ‘Global Wellbeing Survey’, se ha encontrado un vínculo directo entre la forma en que las organizaciones abordan el bienestar de los empleados y el desempeño de su empresa. Lea más Noticias Empresariales.

Actualmente, 82 % de las compañías a nivel mundial cree que el bienestar es importante y una prioridad para la empresa. Asimismo, los empleadores que trabajan este aspecto tienen empleados más sanos (20 %), menor rotación de personal (42 %), un mejor valor de marca (53 %) y una mayor productividad (42 %).

Cuando no se trabaja el tema del bienestar en las compañías y sobresale un entorno laboral negativo pueden causarse problemas físicos y psíquicos, según advierte la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Asimismo, la depresión y la ansiedad tienen repercusiones económicas, ya que se ha calculado que cuestan anualmente a la economía mundial US$1 billón en pérdida de productividad.

En contraste, un estudio de la Universidad de Warwick, en el Reino Unido, aseguró que los colaboradores felices son hasta 12 % más productivos.

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“Trabajar en el bienestar, la motivación y la felicidad de los colaboradores es el secreto para ‘hackear’ la productividad de los equipos. Es más probable que un equipo feliz tenga más energía, sea más creativo y haga mejor sus labores”, manifestó Ana Maria Herazo, directora de Talengo.

Para la experta, una de las herramientas que pueden ayudar a la implementación y estructuración de un ambiente ideal es el salario emocional, que se relaciona con generar ganancias en la parte mental, además, de ofrecer beneficios monetarios que ya conocemos.

“La táctica se basa en entregar beneficios no económicos para motivarlos y que conducen al desarrollo personal y profesional”, finalizó.

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