El Grupo Aeroportuario del Sureste (ASUR) anunció un acuerdo para adquirir el 100 % de las acciones de Companhia de Participações em Concessões (CPC), una subsidiaria de Motiva Infraestrutura de Mobilidade S.A., por US$936 millones.
La operación implica un valor empresarial de US$2.566 millones.
CPC controla participaciones en 20 aeropuertos ubicados en Brasil, Ecuador, Costa Rica y Curazao. Entre ellos destacan:
- Aeropuerto Internacional de Quito (Ecuador)
- Aeropuerto Internacional Juan Santamaría, en San José (Costa Rica)
- Aeropuerto Internacional de Curazao
- Aeropuerto Internacional de Confins (Brasil)
- Aeropuerto de Pampulha y varios aeropuertos de los bloques Sur y Central en Brasil
Por el lado de Colombia, opera a través de dos concesionarias: Airplan y Aeropuertos de Oriente.
La primera tiene a cargo la operación de las terminales: aeropuerto Enrique Olaya Herrera, aeropuerto internacional José María Córdova en Medellín; el aeropuerto Los Garzones en Montería; el aeropuerto Antonio Roldán Betancourt en Carepa; el aeropuerto El Caraño en Quibdó y el aeropuerto Las Brujas en Corozal.
En cuanto a Aeropuertos de Oriente, tiene concesiones para operar en: Simón Bolívar en Santa Marta; Almirante Padilla en Riohacha; Alfonso López Pumarejo en Valledupar; Camilo Daza en Cúcuta; Palonegro en Bucaramanga y Yariguíes en Barrancabermeja.
La cartera registró, al cierre de septiembre de 2025, un Ebitda de US$375 millones, en base al 100 % y una deuda financiera neta al 30 de septiembre de US$1.180 millones.

Una expansión estratégica para ASUR
Con esta adquisición, ASUR suma cuatro nuevos países a su portafolio —Brasil, Ecuador, Costa Rica y Curazao— y refuerza su presencia más allá de México, Colombia y Puerto Rico.
La operación ampliará su volumen de pasajeros de forma significativa:
añadirá más de 45 millones de viajeros a los 71 millones que el grupo reportó en 2024, consolidándolo como uno de los principales operadores aeroportuarios del continente.

Además, 17 de los 20 aeropuertos adquiridos cuentan con más de 15 años restantes en sus concesiones, lo que garantiza estabilidad de largo plazo para la inversión.
El cierre de la transacción está previsto para el primer semestre de 2026, sujeto a las aprobaciones regulatorias.
ASUR financiará la compra con recursos propios y con un crédito comprometido por JPMorgan Chase Bank. J.P. Morgan Securities actúa como asesor financiero exclusivo, mientras que firmas legales en Brasil, Ecuador, Curazao y otras jurisdicciones acompañan el proceso.




