El expresidente de Colombia Álvaro Uribe Vélez planteó una larga serie de dudas respecto a la reforma a la salud radicada esta semana en el Congreso.
Uribe, quien cuando fue senador promovió la Ley 100 en 1993, escribió las 52 preocupaciones que tiene en un documento titulado “Salud: ajustes sin desbarajustes”. El expresidente aseguró que su motivación es “contribuir a la discusión” de la reforma a la salud.
La primera de las críticas de Álvaro Uribe a la reforma a la salud plantea el tono de las demás. “Se observa un guion ideológico que marchita al sector privado, incluidas las fundaciones de salud, e impone un peligroso monopolio estatal”, dice en el documento que fue publicado por El Colombiano.
Otra de las preocupaciones es que los Centros de Atención Primaria (CAP) tendrían un costo de $10 billones, “dejando por fuera los equipos (médicos)”. Uribe también asegura que la reforma a la salud crearía un “entramado burocrático” que aumentaría la demora para remitir a pacientes.
Y apunta que “la posibilidad de reclamo en un monopolio estatal se convierte en un privilegio político”.
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En las críticas de Álvaro Uribe a la reforma a la salud también se plantea la dificultad para el acceso a medicamentos. “Aquí surge otra preocupación: que cualquier farmacia o dispensario de medicamentos tenga que depender de un monopolio estatal, con riesgos de desabastecimiento y de logística de distribución”.
“De aprobarse el proyecto se pasaría del sistema de aseguramiento mixto a uno de intermediación estatal y política. En efecto, el proyecto desconoce el carácter de aseguradoras de las EPS”, plantea el expresidente.
Y sobre las EPS, columna vertebral del actual sistema de salud, en el documento de las críticas de Álvaro Uribe a la reforma a la salud se lee que “las EPS podrían ser Centros de Atención Primaria, hospitales con la nueva terminología, o contratistas del Estado. En definitiva, se acaban”.
E insistiendo en los riesgos de que haya un “monopolio estatal”, Uribe asegura que “muchas EPS fracasadas han tenido origen en el sector público, nacional y regional. Esta realidad acredita que el Sistema actual ha sido realmente mixto, con el Estado como regulador y vigilante, pero sin monopolios operativos”.
Las críticas de Álvaro Uribe a la reforma a la salud terminan con un paralelo entre Cuba y Colombia. “El paraíso que le muestran a los visitantes es opuesto a lo que registra el pueblo cubano. El monopolio estatal comenzó bien y hoy es un total caos”, concluye el documento.
