El Instituto de Finanzas Internacionales (IIF) publicó un informe en el cual señala que las vulnerabilidades relacionadas con la deuda en muchos países de bajos ingresos son una fuente de preocupación creciente; ya que la deuda externa y la deuda pública global han alcanzado sus márgenes más altos desde 2005.
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De este modo, la deuda externa en los países de más bajos ingresos ha aumentado en más de 10% desde 2012, superando el 37% del PIB en 2017.
Los acreedores privados ahora representan más del 20% del total de la deuda externa a largo plazo con garantía pública (PPG), en comparación con el 8% de 2010.
También resalta que, dado que el crédito bancario ahora representa alrededor del 7% del total de la deuda externa a largo plazo de PPG, la proporción de tenedores de bonos ha aumentado a casi el 12%, en comparación con menos del 1% en 2010, ayudando a explicar el fuerte crecimiento de la tasa de interés promedio de la nueva deuda.
A pesar de algunas mejoras en los datos fiscales en muchos países, los ingresos más altos no han sido suficientes para reducir la deuda neta de los gobiernos en muchos casos. Zambia, Ghana y Honduras registraron los aumentos más pronunciados, reflejando principalmente un mayor gasto de intereses, concluyó el IIF en su informe.[/content_control][login_widget]
