Tras su sellamiento, ayer dejó de fluir el pozo Lisama 158 desde las 6:30 p.m., así como el afloramiento, en el corregimiento La Fortuna, Barrancabermeja, anunció el presidente de Ecopetrol, Felipe Bayón Pardo.
“Ya no hay emanaciones (…) Hay que seguir con todo el trabajo de contención y sellarlo definitivamente”, precisó el presidente de la compañía, esta mañana desde el lugar del evento.
Añadió que el equipo especializado Snubbing Unit traído desde Houston permitirá en próximos días tener un mejor diagnóstico de lo que sucedió en el pozo, además de que los expertos entrarán a examinar su condición mecánica y técnica.
El montaje de dicha unidad —160 toneladas de equipo sobre la cabeza del pozo— comenzó tras la llegada de las últimas cargas la noche de ayer. Se estima que la operación comience en pocos días.
“No descansaremos hasta resolver en forma definitiva esta situación. Estamos comprometidos con esta región del país y seguiremos trabajando de la mano de las comunidades y las autoridades para restablecer las condiciones ambientales y sociales en el menor tiempo posible”, reiteró el directivo.
Debido al vertimiento desde el 2 de marzo a la quebrada La Lizama de 550 barriles de petróleo, que se mezclaron con lodos y aguas lluvias, se registró una mortandad de animales silvestres y peces, y afectación de cuerpos hídricos y bosques del Magdalena Medio.
