El mercado laboral de Estados Unidos mostró señales mixtas en noviembre, según el más reciente informe de empleo de la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS).
Las cifras revelan que las nóminas no agrícolas aumentaron en 64.000 puestos, superando la estimación de consenso del mercado, pero al mismo tiempo la tasa de desempleo subió al 4,6 %, un nivel mayor al anticipado por los analistas.
Crecimiento del empleo
El aumento de 64.000 empleos en noviembre fue superior a la proyección del Dow Jones, que esperaba un crecimiento de 45.000 puestos. No obstante, el dato confirma que el mercado laboral estadounidense continúa en una fase de desaceleración, con un ritmo de contratación significativamente inferior al observado en años anteriores.
Este comportamiento se da en un contexto de bajas contrataciones y bajos despidos, una dinámica que ha caracterizado al mercado laboral durante gran parte de 2025, y que se ha visto reforzada por las políticas migratorias más estrictas del presidente Donald Trump, las cuales han reducido el flujo de trabajadores inmigrantes hacia la economía estadounidense.
Octubre registró una caída del empleo
Junto con el informe de noviembre, el BLS publicó el informe correspondiente a octubre, que mostró una pérdida neta de 105.000 empleos, confirmando las expectativas de los economistas de Wall Street, que anticipaban una corrección tras el sorpresivo aumento de 108.000 puestos reportado inicialmente en septiembre.
La contracción del empleo en octubre estuvo explicada principalmente por una fuerte reducción del empleo público, luego de que entraran en vigor despidos diferidos a comienzos de este año. En ese mes, las nóminas gubernamentales cayeron en 162.000 puestos, mientras que en noviembre registraron una disminución adicional de 6.000 empleos.
El informe también incluyó revisiones a la baja de meses anteriores: agosto fue ajustado en 22.000 empleos adicionales, mostrando una pérdida más profunda de 26.000 puestos, mientras que septiembre fue revisado a la baja en 11.000 empleos. Con ello, octubre se convirtió en la tercera ocasión en seis meses en la que las nóminas no agrícolas registraron un resultado neto negativo.

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Desempleo al alza
La tasa de desempleo subió al 4,6 % en noviembre, un nivel mayor al esperado por el mercado y que refleja un ligero deterioro en las condiciones laborales, pese al crecimiento moderado del empleo.
El BLS advirtió que la encuesta de hogares, utilizada para calcular la tasa de desempleo, seguirá viéndose afectada durante varios meses por los efectos del confinamiento y las dificultades operativas derivadas del cierre del gobierno. De hecho, estos problemas llevaron previamente a la cancelación tanto del informe de empleo como del índice de precios al consumidor (IPC) de octubre, dos de los indicadores más vigilados por los mercados.
El mercado laboral no presiona la inflación
Uno de los puntos más relevantes del informe fue el comportamiento de los salarios. Las ganancias promedio por hora aumentaron solo 0,1% en noviembre, muy por debajo de la estimación del 0,3 %, mientras que el crecimiento anual se ubicó en 3,5 %, el avance más bajo desde mayo de 2021.
Este dato respalda la postura de la Reserva Federal, cuyos funcionarios han insistido en que el mercado laboral no es actualmente una fuente de presiones inflacionarias, pese a que la inflación general sigue siendo persistente.
En su reunión más reciente, la Fed redujo su tasa de interés clave en 25 puntos básicos, pero dejó claro que el umbral para nuevos recortes es ahora más exigente. Con tres reducciones consecutivas desde septiembre, la tasa de fondos federales se sitúa actualmente en un rango objetivo de 3,5 % a 3,75 %.
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