Pese a incertidumbre electoral, Fitch confirmó calificación de Colombia y espera mejor PIB

Fitch Ratings confirmó este viernes la calificación de incumplimiento de emisor (IDR) en moneda extranjera (FC) de largo plazo (LT) de Colombia en 'BB+'.

La agencia internacional confirmó este viernes la calificación de incumplimiento de emisor (IDR) en moneda extranjera (FC) de largo plazo (LT) de Colombia en ‘BB+’.

En su reporte dijo la firma que la perspectiva de la calificación colombiana se mantuvo en “estable”. Todas las noticas macroeconómicas aquí.

Con la decisión de hoy, Fitch confirma la decisión que había tomado en diciembre de 2021 cuando mantuvo a Colombia sin grado de inversión tras degradar la calificación en julio de 2021.

Las calificaciones de Colombia, dijo la agencia, reflejan el historial de estabilidad macroeconómica y financiera del país respaldado por un banco central independiente con un régimen de metas de inflación y una moneda de libre flotación.

Además, están restringidas por los grandes déficits fiscales que han resultado en un aumento relativamente mayor en la carga de la deuda y los intereses que la mediana de ‘BB’, alta dependencia de los productos básicos y cuentas externas más débiles.

En medio de un proceso de recuperación económica, Fitch mejoró la estimación de crecimiento para el PIB de Colombia hasta el 6 % en 2022 (desde 5,2 %) después de crecer un 10,7 % en 2021, impulsado por un fuerte consumo público y privado y términos de intercambio favorables.

“Esto incorpora un efecto de arrastre de 2021 que fue particularmente fuerte (4,5 pp), dado que las cifras de 2021 se vieron muy afectadas por las perturbaciones en el 2T21. Esperamos que el crecimiento se desacelere en el segundo semestre de 2022 a medida que la inflación afecte el consumo de los hogares y se reduzca a 2,4 % en 2023, ya que Colombia enfrenta una serie de obstáculos, incluido un ajuste fiscal significativo con impuestos más altos, un menor gasto relacionado con la pandemia y un endurecimiento monetario continuo”, citó el informe.

Fitch también proyecta precios promedio del petróleo más bajos, un crecimiento global más débil y tasas de interés globales más altas que podrían obstaculizar el crecimiento. Espera que el crecimiento de Colombia regrese a un “ritmo tendencial de 3,3% en el mediano plazo”.

Inflación y otros indicadores
La tasa de inflación de Colombia “ha sorprendido al alza” alcanzando el 9,1% interanual en mayo, dijo la agencia, impulsada en gran parte por los precios de los alimentos, mientras que los fuertes subsidios a los precios de los combustibles y la reducción del IVA en los alimentos han contenido parcialmente los efectos del shock de precios global.

Fitch espera que la inflación de fin de período alcance el 8 % en 2022 y el 4 % en 2023, por encima del objetivo del banco central del 3 %, impulsada en gran medida por los precios de los alimentos.

Además, las expectativas de inflación han aumentado para los próximos 12 meses (4% en 2023) pero están más cerca de la meta en 24 meses (en 3,7%).

Consideró que dado el fuerte repunte económico y el aumento de la inflación y las expectativas de inflación, el banco central comenzó a subir sus tasas de política en septiembre de 2021 en un total de 425 pb hasta mayo de 2022 a 6%.

Espera que el banco central aumente gradualmente las tasas durante 2022 para alcanzar el 8% para el final del año.

“Existen más riesgos de inflación derivados de la indexación, continuas perturbaciones externas negativas de los precios de las materias primas y cuellos de botella en la oferta”, agregó.

En el lado fiscal, Fitch pronostica un déficit fiscal del Gobierno General del 5,9 % del PIB en 2022, inferior al resultado del 7,1 % del PIB en 2021 debido al desempeño superior de los ingresos y cierta moderación del gasto, incluso cuando el gobierno ha extendido algunas medidas de reactivación económica y pandémica hasta 2022.

“La ejecución insuficiente de los gastos de capital típica durante los años de transiciones políticas también ayudará a frenar los gastos. Fitch pronostica que el déficit caerá al 4,1% del PIB en 2023 a medida que se sienta el impacto de la reforma fiscal del año pasado y se reduzcan los gastos relacionados con la pandemia. El gobierno aprobó una reforma fiscal revisada en septiembre de 2021 que se basó principalmente en los impuestos corporativos”, reveló.

Por el lado del gasto, prevé Fitch que el gasto relacionado con la pandemia, incluida la transferencia de efectivo y la asistencia laboral para los más vulnerables, finalice en 2022. Sin embargo, las presiones para un nuevo gasto social han aumentado y los aumentos de impuestos han resultado polémicos, como se expresó en las protestas de mayo de 2021, limitando la ventaja fiscal en cualquier resultado.

Al hablar de la deuda de Colombia, el informe de Fitch indica que la recesión económica de 2020, los grandes déficits fiscales y la depreciación del peso llevaron a un aumento significativo de la deuda del gobierno general (GG) al 58,6 % del PIB en 2020 desde el 44,9 % del PIB en 2019.

Recordó que el nivel de deuda se mantuvo estable en 2021 a pesar de los altos crecimiento del PIB nominal (17%), debido a un alto déficit fiscal y la depreciación de la moneda.

Así, Fitch espera que la deuda GG/PIB caiga marginalmente en 2022 a alrededor del 58%, ligeramente por encima de la mediana ‘BB’. Hoy el director de Crédito Público, César Arias, dijo en Barranquilla que la deuda cerraría en niveles de 60 % del PIB.

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Es probable para Fitch que se necesiten más esfuerzos para reducir el nivel de deuda de manera significativa a partir de entonces.

En cuanto al déficit en cuenta corriente de Colombia, recalcó la agencia que fue del 5,7 % del PIB en 2021, impulsado por un fuerte aumento de las importaciones y las remesas de ganancias.

Espera “cierta moderación en el déficit en 2022-2023, cayendo a 4.6% y 4.2% del PIB respectivamente a medida que las exportaciones aumentan debido a precios más altos (con pocos cambios en los volúmenes), pero las importaciones y las remesas de ganancias siguen siendo altas”.

La deuda externa neta de Colombia ha estado aumentando durante la última década a más del 20% del PIB en 2022, desde solo el 2% en 2012, impulsada en gran medida por el aumento de la deuda externa del sector público, y ahora es mayor que la mediana ‘BB’.

Las reservas internacionales de Colombia han aumentado en los últimos dos años, alcanzando los US$58.000 millones, frente a los US$52.700 millones de 2019.

Como resultado, se espera desde Fitch que las reservas de Colombia continúen cubriendo las necesidades del país. Además, el FMI aprobó una nueva Línea de Crédito Flexible a dos años con Colombia en abril de 2022 por US$9.800 millones, una reducción de la línea de US$17.200 millones aumentada en septiembre de 2020 debido a la pandemia.

Elecciones y presidente
Luego de las elecciones presidenciales de primera vuelta el 29 de mayo de 2022, Gustavo Petro, de izquierda, se enfrentará al independiente Rodolfo Hernández en una segunda vuelta electoral el 19 de junio.

Recordó Fitch que Petro se ha postulado en una plataforma de mayor gasto social pagado con aumentos de impuestos, reforma de las pensiones que implica una mayor participación del gobierno y el fin de la dependencia del petróleo al detener la exploración petrolera y centrarse en las energías renovables.

En el caso de Rodolfo Hernández, se ha postulado en una plataforma anticorrupción y se ha comprometido a reducir los impuestos y recortar el gasto público.

En las elecciones al Congreso celebradas en marzo de 2022, ningún bloque ganó más del 15,6 % de los escaños en el Senado o el 19,6 % de la Cámara de Representantes.

Un Congreso fragmentado hace necesaria la creación de consenso para aprobar legislación, independientemente de quién gane la presidencia. Esto respalda nuestra opinión de que el amplio marco de políticas de Colombia permanecerá intacto y que los controles y equilibrios institucionales, incluido un banco central independiente y un sistema judicial autónomo, probablemente evitarán la radicalización de las políticas”, aseguró la calificadora.

Las áreas clave de posibles reformas incluirán la política fiscal, las políticas del sector del petróleo y el gas, la reforma de las pensiones, la seguridad, la salud, la vivienda y la educación, muchas de las cuales podrían implicar presiones fiscales, añadió.

Factores para calificación negativa/rebaja, según Fitch
—Finanzas Públicas: Un fracaso para lograr la consolidación fiscal que conduce a un deterioro significativo en la relación deuda GG a PIB de Colombia en relación con la mediana de los pares ‘BB’;

–Macro: Deterioro de las perspectivas de crecimiento a mediano plazo muy por debajo del potencial histórico de Colombia de 3,3%, con ramificaciones sociales adversas tales como altos niveles de desempleo y pobreza;

–Finanzas externas: un gran aumento de la deuda externa neta respecto del PIB, lo que aumenta las vulnerabilidades externas.

Factores para una acción/mejora de calificación positiva, según Fitch
–Finanzas Públicas: Logro de consolidación fiscal consistente con una relación GGGD/PIB en constante disminución y una mayor credibilidad de la política fiscal;

–Macro: Mayor crecimiento económico sostenido a mediano plazo por encima de los promedios históricos de Colombia de alrededor de 3,3%;

–Estructurales: Mejora en los indicadores de gobernabilidad que indican una mayor cohesión social e impulso en torno a reformas que podrían mejorar la posición fiscal estructural de Colombia y las perspectivas de crecimiento a mediano plazo.

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