En uno de sus más recientes análisis, la calificadora de riesgo Fitch Ratings expone algunos de los problemas a los que se enfrentaría el sector eléctrico de Colombia con la intervención política que ha sonado tanto en los últimos meses.
Para Fitch Ratings, la intervención política podría poner en peligro la expansión del sector eléctrico en el corto plazo.
En otras palabras, la acción sin precedentes del presidente de Colombia, Gustavo Petro, para frenar el aumento de las tarifas eléctricas podría deteriorar los flujos de caja operativos, golpeando más duramente a las empresas de generación pura.
«El decreto es una clara señal de que el nivel de intervención del presidente Petro en los mercados regulados será alto. Esto contrasta con las normas históricas, cuando el entorno regulatorio era históricamente visto como independiente de la influencia política», manifestó José Luis Rivas, director senior de Fitch Ratings.
Rivas agregó que «si tales medidas afectan la capacidad de las empresas de servicios públicos para generar flujos de caja estables y predecibles para financiar capex y cumplir con los compromisos financieros de manera oportuna, los perfiles de crédito podrían verse presionados”.
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Según un el informe de Fitch Ratings, las acciones del mandatario colombiano pondrán en peligro la expansión requerida de la capacidad de generación.
Esto porque un marco regulatorio independiente que tenga un proceso de fijación de tarifas basado en consideraciones técnicas es la consideración clave cuando las empresas toman decisiones para invertir en el sector.
Históricamente, las tarifas han permitido a las empresas de servicios públicos colombianas remunerar las inversiones de capital, los costes administrativos, operativos y de mantenimiento, así como garantizar un rendimiento justo del capital invertido.
De acuerdo con Fitch, las empresas de generación pura con un alto porcentaje de sus ingresos derivados de Colombia son las más expuestas a un deterioro del marco regulatorio del país.
Y las empresas integradas que operan en generación, distribución y comercialización son menos vulnerables a acciones negativas de calificación.
“Fitch Ratings considera que el intento del presidente Petro de hacerse cargo de las regulaciones colombianas de servicios públicos mediante una orden ejecutiva no tiene precedentes para un país que históricamente ha equilibrado los intereses de los actores del mercado con los de los usuarios finales”, precisa la entidad calificadora.
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Intervención de Petro en el sector eléctrico
Cabe recordar que el 16 de febrero de 2023, el presidente Gustavo Petro firmó un decreto presidencial que le permitía asumir la regulación de todos los servicios públicos colombianos, incluidas las empresas de electricidad, gas natural y agua, durante 90 días.
Fitch cree que este movimiento podría, en última instancia, presionar las calificaciones de las empresas y amenazar la expansión de la capacidad.
El decreto del presidente Petro tiene como objetivo frenar los aumentos recientes en las tarifas eléctricas, que aumentaron alrededor de un 22 % en 2022, en comparación con la inflación general del 13 %.
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Sin embargo, el decreto fue suspendido provisionalmente por el Consejo de Estado y no está claro cómo se ejecutaría.
Al respecto, Fitch cree que es probable que el resultado de esta intervención regulatoria apunte a las eléctricas calificadas como:
- Empresas Públicas de Medellín ESP (EPM; BB+/Rating Watch Negative)
- Enel Colombia SAESP (BBB/Estable)
- Isagen SAESP (BBB–/Estable)
- Celsia Colombia SAESP (AAA[col]/Estable)
- TermoCandelaria Power SA (BB/Estable)
- Grupo Energía Bogotá SAESP (GEB; BBB/Estable)
- Interconexión Eléctrica SAESP (BBB/Estable)