Reforma laboral podría elevar entre 3 % y 5 % el desempleo juvenil en Colombia

Un informe de la Universidad de San Buenaventura señala que será necesario adoptar medidas específicas para los trabajadores menores de 28 años.

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Un informe de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Políticas de la Universidad de San Buenaventura advierte que la reforma laboral podría elevar entre el 3 % y el 5 % el desempleo juvenil.

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Y es que este grupo etario es particularmente vulnerable en el mercado laboral. La informalidad laboral en jóvenes sigue por encima del 56,8 %, mientras que la desocupación laboral para ellos se ubica en el 16 %, según cifras del DANE.

Otros analistas, académicos y gremios han manifestado su preocupación por el impacto de la reforma laboral en el mercado, especialmente en los jóvenes, que podrían sufrir los mayores efectos colaterales por los cambios en las reglas de juego.

Firmas como Crowe Co y gremios como Acopi, entre otros, coinciden en que la reforma también podría elevar entre el 17 % y el 34 % los costos no salariales de las pymes, lo que llevaría a muchas a reducir su planta de personal, conformada en su mayoría por trabajadores menores de 28 años.

Además, la reducción de la jornada diurna, que ahora irá hasta las 7:00 p. m., y no hasta las 9:00 p. m., y el incremento de los recargos dominicales y festivos al 100 %, representaría un aumento del 9 % en costos adicionales para estas unidades productivas, un factor que puede frenar nuevas contrataciones, en especial para el personal joven sin experiencia.

El documento de la Universidad de San Buenaventura señala que será necesario adoptar medidas específicas para los trabajadores menores de 28 años. Particularmente, propone la creación de una vinculación laboral específica para este grupo de la población con una duración limitada entre seis y doce meses.

Esta figura intermedia entre el contrato de aprendizaje y el indefinido incluiría un salario mínimo y afiliación obligatoria a salud y pensión, pero no tendría recargos nocturnos, dominicales ni obligación de indemnización por terminación anticipada con el fin de facilitar la entrada al mercado sin trasladar todos los costos al empleador.

“La reforma está diseñada para dignificar el trabajo, pero el primer empleo exige una aproximación flexible y gradual. Este contrato funcionaría como puente de entrada sin poner en jaque a las microempresas”, explicó Pedro Villamizar, director del Consultorio Jurídico de la Universidad de San Buenaventura.

La propuesta del contrato juvenil, no solo se ajusta a la realidad nacional, sino que se inspira en modelos aplicados con éxito en países como Alemania (sistema Ausbildung), Italia (apprendistato) y Nueva Zelanda (Youth Wage Subsidy), donde la contratación de este segmento de la población se estimula con subsidios parciales o esquemas escalonados de cotización, según la institución educativa.

El informe resalta que, si no se habilita un esquema alternativo como el contrato juvenil, las empresas podrían acudir a automatización o tercerización como respuesta a los nuevos costos. Incluso los gremios ya hablan de sustituir mano de obra joven por inteligencia artificial y tecnología básica.

“El reto no es solo legislar, sino adaptar el marco legal a las capacidades reales de las empresas. Si se quiere proteger a los jóvenes, hay que construirles una entrada formal posible”, concluyó Villamizar.