A diferencia de lo que piensa el gobierno del presidente Gustavo Petro, vuelven a sumarse algunas voces que se refieren al futuro de las tasas de interés a manos del Banco de la República: no parece ser un buen momento para empezar con una baja agresiva de las tasas de interés.
En un reciente informe de la OCDE sobre el comportamiento de la economía colombiana, el organismo multilateral asegura que no parecieran estar dadas las condiciones para que el emisor empiece una reducción constante de su política monetaria.
Explica la OCDE que las tasas de interés, que mantiene altas el emisor en Colombia, deben evitar una relajación prematura para garantizar que siga bajando la inflación y salvaguardar su credibilidad.
“Para conseguir la estabilización de la deuda y el cumplimiento de las reglas fiscales, al tiempo que se obtiene un cierto margen fiscal para implantar el ambicioso programa de reformas sociales, será necesario mejorar la eficiencia del gasto y los ingresos públicos”, explica el reporte.
Pero sí propone la OCDE que, para buscar respuestas sobre lo que es el comportamiento de las tasas de interés en Colombia, se aumenten los incentivos para la creación de empleo formal reduciendo los costos laborales no salariales y mejorando la formación con miras a impulsar tanto la productividad como la equidad.
¿Qué más dice la OCDE sobre las tasas de interés en Colombia?
“El endurecimiento de la política monetaria, con las tasas de interés en niveles del 13,25 % desde mayo, ha contribuido al descenso de la inflación hasta el 10,5 % interanual en octubre. La inflación subyacente se situó en el 9,5 %”, advierten desde la OCDE.
Al tiempo que las tasas de interés han llevado también a que la inflación en Colombia cayera a pesar de las importantes subidas de los precios de la energía, sobre todo del combustible, y del aumento del 16 % en el salario mínimo en enero, cuya repercusión se ha hecho notar especialmente en el sector servicios.
“La alineación de los precios nacionales de la gasolina, anteriormente subvencionados, con los precios internacionales mitiga el impacto de los precios mundiales del petróleo en las finanzas públicas del país”, complementa el reporte.
La postura del organismo multilateral coincide con lo que ha mencionado el gerente del Banco de la República, Leonardo Villar, sobre la imposibilidad de que el país vea una baja en las tasas de interés porque precisamente los escenarios de inflación en Colombia no parecen ser tan claros.
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Dado lo anterior, concluye la OCDE que “se espera que la gravedad actual del fenómeno meteorológico del Niño, que podría causar sequías y ejercer presión en el precio de los alimentos debido a la caída de las cosechas, alcance su punto máximo a principios de 2024”.
