Wall Street cerró este miércoles una jornada teñida de rojo como consecuencia de la revaluación crediticia de Estados Unidos por parte de la calificadora Fitch Ratings.
El índice Nasdaq cerró con una caída de 2,17 %, la peor desde febrero; mientras el S&P 500 retrocedió 1,38 % y el Dow Jones hizo lo propio en 0,9 %.
La calificadora de riesgo Fitch Ratings rebajó desde AAA a AA+ la calificación soberana de Estados Unidos, toda vez se ha producido “un deterioro” de las condiciones fiscales del país.
Fitch Ratings asegura que las constantes diatribas políticas por el techo de la deuda han erosionado este perfil nacional.
El déficit y la deuda de Estados Unidos “no harán más que crecer” en los próximos tres años, advirtió la calificadora.
“Los comentarios de Fitch no fueron una sorpresa para quien los sigue de cerca, lo que sí sorprendió fue el momento en el que se ofrecieron. Eso sí tomó por sorpresa a todos”, señaló Edward Moya, analista senior de mercado para las Américas de la plataforma Oanda.
Por otro lado, Mona Mahajan, estratega senior de inversión en Edward Jones, señaló a la cadena CNBC que los inversores pueden usar esta recalificación de Fitch “como una razón para tomar ciertos beneficios”, pero considera que esto es probablemente también “una parte natural del ciclo del mercado”.
Mahajan agregó que las condiciones macroeconómicas son “muy diferentes” a la última vez en la que Estados Unidos recibió una recalificación a la baja de su perfil crediticio.
Así impactó la revaluación de Estados Unidos a los mercados de Europa y Asia
La decisión de Fitch Ratings de rebajar la calificación crediticia a Estados Unidos también impactó a los mercados de Asia y Europa con un pleno de números rojos también.
El FTSE 100 británico y el DAX alemán cayeron 1,36 %, respectivamente, mientras que en el país insular también ya persiste el nerviosismo sobre la decisión de tasas que tomará el Banco de Inglaterra en la mañana de este jueves.
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La mayor caída la registró el IBEX 35 español con un revés del 1,83 %.
Mientras tanto, las pérdidas fueron lideradas por el Hang Seng de Hong Kong con un revés del 2,47 %, seguido por el Nikkei japonés que perdió 2,30 %.
