La Reserva Federal de Estados Unidos (FED) mantuvo el pie en el suelo este miércoles en términos de la ayuda que está brindando a una economía que, según los funcionarios del banco central, se ha desacelerado.
De acuerdo Cnbc, en línea con las expectativas del mercado, el Comité Federal de Mercado Abierto de formulación de políticas mantuvo la tasa de interés de referencia a corto plazo anclada cerca de cero y que mantenía un programa de compra de activos en el que la FED compra al menos US$120.000 millones al mes.
En el centro del movimiento para mantener la política históricamente acomodaticia estaba una economía en la que los sectores más vulnerables a la pandemia son los más afectados.
“El ritmo de recuperación de la actividad económica y el empleo se ha moderado en los últimos meses, con la debilidad concentrada en los sectores más afectados por la pandemia”, destaca el comunicado posterior a la reunión del comité.
La declaración reiteró que Covid-19 está “causando enormes dificultades humanas y económicas en los Estados Unidos y en todo el mundo”, agrega el documento.
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Por lo demás, el comité mantuvo la declaración, además de adicionar a su posición que el crecimiento dependerá de la pandemia. “El camino de la economía dependerá significativamente del curso del virus, incluido el progreso en las vacunas”, explica el comunicado.
Según Cnbc, la decisión significa que la tasa de fondos federales, que sirve como punto de referencia para una variedad de instrumentos de deuda de consumo, permanecerá anclada en un rango entre 0 % y 0,25 % y, más recientemente, cotizaba en 0,08 %.
Cabe recordar que la FED llevó la tasa a cero en los primeros días de la pandemia Covid-19 y la ha dejado allí desde entonces. En los últimos meses, los funcionarios se han comprometido con las tasas bajas de manera aún más agresiva, prometiendo no comenzar a subir incluso si la inflación se acerca o supera ligeramente el objetivo del 2 % del banco central.
Los mercados estaban atentos, sin embargo, para ver si la declaración proporcionaría alguna pista sobre el futuro de las compras de activos o la flexibilización cuantitativa. Desde el comienzo de la crisis del coronavirus, la Reserva Federal expandió sus tenencias en más de US$3 billones, llevando su balance a casi US$7,5 billones.
Aunque la inflación sigue siendo baja ahora, a los inversionistas les preocupa que el banco central pueda comenzar a reducir las compras de forma inesperada si las condiciones cambian y provocan un tumulto en el mercado. La declaración no ofreció una nueva orientación sobre el tema, por lo que los participantes del mercado buscarán la conferencia de prensa posterior a la reunión del presidente Jerome Powell para obtener más detalles.
Los funcionarios de la FED siguen siendo cautelosos con una economía que ha experimentado una recuperación de dos velocidades, con los que ganan en los tramos de ingresos más altos y los de abajo, en particular los trabajadores de las industrias de servicios, con malos resultados. Esa disparidad ha formado gran parte del ímpetu detrás del régimen flexible de metas de inflación promedio de la autoridad monetaria, destacó Cnbc.
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Según el enfoque, la FED ya no aumentará las tasas en previsión de la inflación, sino que tolerará niveles más altos en aras de una recuperación más inclusiva. En el pasado, cuando la tasa de desempleo caía a niveles consistentes con lo que parecía ser el pleno empleo, la Reserva Federal instituía alzas preventivas para detener la inflación en seco.
La economía actual muestra signos contradictorios de inflación, con los costos de la vivienda y los materiales aumentando y la inflación de los servicios a la baja. Desde un punto de vista macroeconómico, la economía creció con fuerza en el cuarto trimestre en general, aunque la actividad se desaceleró hasta finales de año.
(Con información de Cnbc)
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