La FIFA decidió retirar el uso generalizado de precios dinámicos para las boletas del Mundial 2026, en medio de cuestionamientos sobre el costo de asistir al torneo que será el más grande en la historia del fútbol.
El organismo confirmó que reservará segmentos completos de boletería a precios fijos para categorías específicas de aficionados, especialmente los hinchas de las Asociaciones Miembro Participantes.
Cada federación recibirá el 8 % del total de entradas de los partidos en los que participe su selección, incluidos los de fases eliminatorias. Este bloque tendrá precios estables y no fluctuará según demanda, como sí lo hará el restante del inventario general.
Los precios divulgados por la FIFA muestran una brecha significativa entre las boletas más accesibles y las más costosas: las entradas para la fase de grupos comenzarán en US$60, mientras que las más caras para la final alcanzarán US$6.730.
Un sistema de selección aleatoria operará entre el 11 de diciembre y el 13 de enero, periodo en el cual los aficionados podrán solicitar boletas con precio fijo asignado por categoría.

Presión por costos y un mercado norteamericano con reglas distintas
En Norteamérica, la boletería dinámica es legal y ampliamente utilizada, especialmente en el mercado secundario. Según organizaciones del sector, esta práctica responde a algoritmos de demanda que ajustan precios en tiempo real.
La FIFA explicó que su sistema busca garantizar acceso justo y ofrecer alternativas tanto para aficionados tradicionales como para nuevos públicos, en un entorno donde la reventa opera bajo regulaciones distintas a las de otros continentes.
El modelo, que por primera vez se aplicará parcialmente en un Mundial, había generado incertidumbre por el incremento potencial en los precios de alta demanda, especialmente en partidos de selecciones populares.
La preocupación aumentó en la previa del sorteo, en el cual se definirá la ruta de viaje y logística de los aficionados. Los hinchas podrán conocer el calendario definitivo solo a partir del sábado 6 de diciembre, cuando se publiquen fechas, estadios y desplazamientos.
La OCU y Euroconsumers reiteraron que los eventos deportivos globales no deberían adoptar la lógica de fluctuación comercial, argumentando que el acceso a un Mundial depende en gran parte de la planificación financiera previa de los asistentes.
Ambas organizaciones destacaron que la diferencia de costos podría limitar la participación de seguidores de países con menor capacidad adquisitiva, entre los cuales entraría Colombia.

La FIFA reiteró que las fases de venta posteriores incluirán mecanismos de asignación con precio fijo para garantizar acceso. El proceso operará en varias rondas antes del inicio del torneo.
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Con la eliminación del precio dinámico para los grupos de aficionados y el mantenimiento parcial del sistema para otras categorías, el Mundial 2026 combinará modelos de boletería tradicionales con prácticas del mercado norteamericano, en medio de un debate general sobre los costos que, para muchos, parecen exagerados.




