El proyecto de ampliación de la Autopista Norte, en Bogotá, entre las Calles 191 y 245, se retrasará aún más para dar inicio, por cuenta de un pedido hecho en los últimos días por el concesionario a cargo del corredor.
Valora Analitik conoció en primicia que Ruta Bogotá Norte le solicitó a la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) una segunda prórroga de 60 días hábiles en medio del trámite de la licencia ambiental para las obras a ejecutar en ese sector de la capital.
La petición fue aceptada por la entidad, por medio del Auto 003535, en el cual aceptó prorrogar los plazos para que los privados presenten la información adicional requerida dentro del trámite de evaluación.
Dentro de la información requerida al concesionario se encuentran especificaciones y medidas para la conectividad hídrica y ecológica entre los humedales Torca y Guaymaral, el manejo de hábitats sensibles y el control de residuos y drenajes, entre otros.
¿Por qué la ampliación de la AutoNorte en Bogotá se retrasará más?
Sin embargo, con esta nueva solicitud de ampliación de los tiempos, la ampliación de la AutoNorte tendrá un nuevo retraso de aproximadamente tres meses para seguir con la petición de licencia ambiental.
“Recordemos que en este territorio convergen importantes iniciativas de infraestructura con ecosistemas de alto valor ecológico, como los humedales Torca y Guaymaral, así como la Reserva Thomas van der Hammen, patrimonio ambiental de gran relevancia para los y las bogotanas», dijo Irene Vélez, directora de la ANLA.
Y añadió: «Sabemos que la concesionaria es consciente de la importancia de realizar diseños que concilien el desarrollo de la infraestructura vial con el ordenamiento del territorio a partir del agua».
En ese sentido, la funcionaria confirmó que el nuevo plazo para entregar la información ambiental fue aprobada tras la petición de la concesionaria Ruta Bogotá Norte.
Por su parte, la viceministra de infraestructura, Liliana María Ospina, agregó :“Desde el Ministerio de Transporte y la ANI (Agencia Nacional de Infraestructura) reiteramos nuestra convicción sobre la importancia del proyecto Accesos Norte Fase II, el cual avanza actualmente en su fase preoperativa mientras se surte el trámite de la licencia ambiental».
También dijo que este proyecto no solo busca fortalecer la conexión entre el norte de Bogotá y los departamentos de Cundinamarca, Boyacá y los Santanderes, sino también responder a los retos derivados de la crisis climática y a los desafíos de conectividad ecológica entre los humedales Torca y Guaymaral.
«Una vez se otorguen las licencias ambientales correspondientes a las Unidades Funcionales 1 a 5, estaremos en condiciones de iniciar la fase de construcción”, afirmó.
Demoras del Distrito con conceptos clave
Por otro lado, la ANLA le confirmó a este medio que, a la fecha, las secretarías de Ambiente y Planeación de Bogotá no se ha pronunciado frente a la modificación de la reserva vial.
Incluso, en el proceso tampoco se han dado por concluidos los lineamientos de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá para el manejo de la red de acueducto Tibitoc–Casablanca, cuya tubería atraviesa el proyecto.
«Estos conceptos son clave para la continuidad del análisis del Estudio de Impacto Ambiental, así como para el futuro desarrollo del proyecto», afirmó la entidad.
En este punto, es clave recordar que las posiciones de la Alcaldía de Bogotá son determinantes para sacar adelante el megaproyecto, que prevé inversiones por $2,34 billones. Incluso, en la administración de Claudia López estos fueron negados y ahora deben ser enviados nuevamente por la de Galán.
El actual alcalde se ha comprometido con esta iniciativa, que, además, es importante para evitar las inundaciones que se presentan en esta vía de acceso y salida a la capital del país.
Sin embargo, desde febrero que la ANLA les pidió los conceptos a la secretarías a cargo, estas no se han pronunciado al respecto.
