En el marco de la más reciente sesión del Consejo de Ministros, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, realizó un anuncio que marca un punto de quiebre en la política comercial del país.
El mandatario confirmó la terminación del Tratado de Libre Comercio (TLC) entre Colombia e Israel y, además, señaló que habrá modificaciones en el acuerdo vigente con Estados Unidos, cuya implementación ya supera los 12 años.
Durante su intervención, Petro afirmó que el modelo de comercio exterior no debe estar subordinado exclusivamente a intereses de rentabilidad económica, y sostuvo que esta decisión responde a consideraciones ambientales.
En sus palabras, “no somos ese comercio que arrodilla la vida a la codicia, y eso significa que reformamos el TLC; con Israel deja de haber TLC. Las carboneras que generan la exportación deben vender las concesiones, porque me temo que hay más valor en temas de infraestructura que en el propio carbón”.
El jefe de Estado aclaró que la determinación frente a Israel no obedece a represalias diplomáticas ni a las tensiones internacionales derivadas del conflicto en Palestina, sino que corresponde a una estrategia orientada a la transición energética y a la reducción de emisiones contaminantes.
En esa línea, enfatizó en que la circulación de vehículos altamente emisores de CO₂ constituye una amenaza para la vida.
Petro también anunció que en Colombia los automotores y las maquinarias que utilicen tecnologías contaminantes deberán asumir el pago de aranceles, mientras que aquellos que no generen emisiones, sin importar si provienen de China, Brasil o Estados Unidos, estarán exentos de esa carga tributaria.
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Petro y su crítica a Donald Trump
El mandatario colombiano aprovechó su intervención para pronunciarse sobre la situación en la Franja de Gaza.
En este contexto, cuestionó la postura del presidente estadounidense Donald Trump, a quien señaló por su cercanía política con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu.
Petro aseguró que la visita de Netanyahu a territorio estadounidense pudo haber derivado en acciones judiciales en su contra bajo el marco del derecho internacional, pero que la ausencia de tales medidas demuestra un manejo inconsistente de la justicia internacional por parte de Washington.
Finalmente, Petro fue enfático al señalar que, en su criterio, Trump incurre en complicidad al no promover mecanismos que sancionen lo que calificó como crímenes en Gaza.
“Si este señor Trump sigue siendo cómplice de un genocidio como hasta el día de hoy lo es, no merece más que la cárcel y el Ejército no lo debe obedecer”, declaró Petro, subrayando que ningún líder político puede estar al margen de responder ante la justicia internacional.
Ese mismo argumento de que el ejército estadounidense debe sublevarse para no obedecer las órdenes de Trump derivó en que apenas hace dos días le fuera cancelada la visa para ingresar a territorio de Trump.
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