En el marco de la XXVIII Cumbre Iberoamericana celebrada en República Dominicana, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) le entregó 15 recomendaciones a los gobiernos de América Latina, donde la transición energética fue su mayor apuesta.
“La Cepal quiere aportar al diálogo no solo un diagnóstico de brechas y tendencias, sino también la definición de áreas de oportunidad con gran potencial para promover el crecimiento, generar empleo y mejorar el bienestar”, afirmó el secretario ejecutivo de la Cepal, José Manuel Salazar-Xirinachs.
Según cifras de la Cepal, para 2023 se proyecta que los países de Iberoamérica, a excepción del Paraguay, tendrán un crecimiento menor al registrado en 2022, siendo solo cinco países los que registren un repunte mayor al 3 %.
Las recomendaciones de la Cepal a los gobiernos de América Latina
En el medio de un complejo escenario macroeconómico para la región, la Cepal preparó estas 15 recomendaciones, centradas en su mayoría, en la transición energética, una de las temáticas más importantes a nivel global.
Así las cosas, la primera recomendación está relacionada a aprovechar la relocalización de las industrias, comúnmente conocido como nearshoring.
“Los países que reúnan las condiciones adecuadas pueden verse beneficiados por nuevos flujos de inversión extranjera directa (IED)”, señaló el informe.
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A renglón seguido, la transición energética destaca entre los puntos 2 y 4 del documento, en donde resaltó la importancia en la generación de los proyectos en países como Chile o Colombia y la disposición de recursos, como el litio, para que la región sea líder en estos aspectos.
“Cada país tiene ventajas competitivas para ciertos usos del hidrógeno verde y la existencia de industrias complementarias en otros países de la región potencia sinergias”, señaló el documento.
También se mencionó la electromovilidad, escenario en el que la región también está “bien posicionados para aprovechar las oportunidades que están surgiendo en una industria que se encuentra en proceso de profunda transformación”.
La economía circular y la bioeconomía también están presentes dentro de las recomendaciones de la entidad. Esta última, según detallan, cuenta con una alta expectativa de crecimiento para los próximos cuatro a siete años en América Latina.
Otro de los puntos que adelantó la Cepal fue la creación y el impulso de la industria farmacéutica, una inquietud que volvió a despegar en la región a raíz del Covid-19 y que recientemente ya se han dado los primeros pasos para edificarla.
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La industria de dispositivos médicos, una que se consolida lentamente en la región por el desarrollo en Brasil, México, Costa Rica y República Dominicana, también tiene un importante marco de aprendizaje, y puede apuntar al impulso de la mencionada industria farmacéutica.
El resto de las recomendaciones para el desarrollo de la región están relacionadas con el turismo sostenible, la transformación digital, exportación de servicios modernos, fabricación avanzada, gestión del agua y la sociedad del cuidado.
