En fallo de segunda instancia, la Procuraduría General de la Nación reiteró la sanción de destitución e inhabilidad general por 10 años al exministro de Relaciones Exteriores, Álvaro Leyva Durán.
El motivo es “desconocer los principios de la contratación estatal al declarar desierta la licitación pública para la fabricación y expedición de pasaportes”, sostiene el ente de control.
El Ministerio Público ratificó que la decisión que tomó en su momento el entonces canciller careció de fundamento legal y no tuvo como finalidad salvaguardar el deber de selección objetiva, a lo que estaba obligado.
Asimismo, ratificó que la determinación adoptada por el exministro se fundamentó en el hecho de que al proceso únicamente se presentó un único oferente, con lo que ya estaba inhabilitado para declarar desierta la licitación pública, dado que cumplía con todos los requisitos definidos por la entidad en los pliegos de condiciones.
En ese sentido, el ente de control confirmó que Leyva Durán desconoció con su actuación los principios de transparencia, economía y responsabilidad que regulan la contratación estatal, por lo que calificó su falta disciplinaria de manera definitiva como gravísima cometida a título de dolo.
El fallo firmado por el Procurador General de la Nación es de segunda instancia y no admite ningún tipo de recurso.
En la práctica, esto implica que Álvaro Leyva queda fuera de la vida pública institucional por al menos 10 años y con un fuerte antecedente disciplinario que pesa sobre su trayectoria política.