Las partes que deben negociar por el aumento del salario mínimo en Colombia del año entrante presentaron sus propuestas para ajustar el pago. La distancia entre una y otra opción es sustancialmente amplia, lo que hacía prever que la negociación se caería.
De un lado, los trabajadores apuntan a que el incremento debería ser del 16 %, un incremento que los empresarios rechazan por completo, dados los sobre costos laborales que tendrían las empresas.
Mientras tanto, los empresarios ampliaron levemente su límite del 7 % y llevaron a la mesa la opción de que el salario mínimo en Colombia del año entrante dé cuenta de un aumento del 7,21 %, lo que estaría dos puntos por encima del dato de inflación.
Si bien los empresarios han asegurado desde un principio que la salida negociada pareciera estar descartada, el ministro de Trabajo, Antonio Sanguino, volvió a abrir la puerta para que el aumento se dé de manera concertada, muy a pesar de las posturas tan alejadas.
Lo que viene para la decisión del salario mínimo en Colombia
Antonio Sanguino, ministro de Trabajo del gobierno Petro, aseguró: “No hemos querido presentar propuestas concretas, pero queremos informar que ambas partes han mostrado una disposición a aproximarse a un acuerdo”.
Agregó el funcionario que “ni el 7,21 % ni el 16 % son posiciones rígidas. Son puntos de partida para buscar un acuerdo que ojalá podamos entregar al país”.
Según el funcionario, desde el gobierno Petro no se ha definido tampoco una cifra de lo que debería ser el salario mínimo en Colombia del próximo año, pero buscarán que sea una opción que acerque las posturas y se defina el ajuste mediante la mesa de concertación.
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Hasta el próximo 15 de diciembre tiene plazo la mesa de concertación de políticas salariales para tener una decisión negociada, después se podrán convocar mesas extraordinarias, pero la determinación quedaría en manos del presidente Petro después de esa fecha.
