Dos de los proyectos de decreto más grandes y de mayor alcance que desarrolló este año la Unidad de Regulación Financiera (URF) quedarían en firme a principios de 2026 y traerían cambios inmediatos en el sistema financiero.
En primer lugar, el proyecto de decreto de finanzas abiertas, que actualmente permanece en la URF a la espera de dos pronunciamientos de Función Pública y la Superintendencia de Industria y Comercio, seguiría su curso de aprobaciones en el Ministerio de Hacienda en los próximos días antes de llegar a sanción presidencial.
Esta semana, la directora de la entidad, Mónica Higuera, reveló que el Consejo Directivo de la URF aprobó el proyecto de decreto luego de dos rondas de comentarios en enero y junio y varios ajustes en el marco del evento Finanzas Abiertas en los países de la Alianza del Pacífico.
Con las finanzas abiertas obligatorias, los consumidores financieros podrán autorizar a sus entidades para el tratamiento de sus datos frente a terceros, permitiendo que las instituciones financieras compartan información con su consentimiento para ofrecer productos y servicios personalizados.
La directora de la URF explicó que hablar de finanzas abiertas obligatorias “significa reconocer la posibilidad de que el consumidor utilice su información de forma activa, autorizando a su entidad financiera para el tratamiento de sus datos frente a terceros, permitiendo que sus datos trabajen a su favor y se conviertan en una herramienta que le facilite el acceso al crédito, al ahorro y a la inversión”.
La antesala del cambio al régimen de las OPA
Por otra parte, la URF trabajó este año en un proyecto de decreto que actualizará el régimen de las Ofertas Públicas de Adquisición (OPA) para facilitar la entrada de nuevos emisores y corregir las fallas identificadas en el análisis de impacto normativo.
En palabras de Higuera, esta iniciativa surge de la identificación de brechas regulatorias con los estándares internacionales y algunas limitaciones regulatorias internas que han sido objeto de debate por parte de autoridades, emisores, inversionistas y comisionistas.
La propuesta se habilitó para comentarios en segunda ronda hasta finales de octubre, por lo que actualmente se encuentra en proceso de ajustes. El calendario de la entidad le apunta a que Consejo Directivo de la URF revise el texto en su última sesión de este año, una vez obtenga dicho aval podrá seguir su curso en el Ministerio de Hacienda.
Recientemente, la entidad reveló que su plan de trabajo para 2026 incluye consolidar la implementación del nuevo esquema pensional, profundizar el desarrollo del mercado de capitales y fomentar la innovación para el acceso y uso de productos financieros en la economía popular y comunitaria. El objetivo es dar continuidad a los proyectos iniciados este año y responder a los retos del sector financiero y a los objetivos de política pública en materia de estabilidad y confianza.
—




