El Gobierno del presidente Gustavo Petro ha celebrado con bombos y platillos la superación de los 3 gigavatios (GW) de capacidad instalada de energía renovable no convencional, un hito que, a primera vista, parecería confirmar el éxito de la transición energética en Colombia.
Sin embargo, un análisis de las cifras y los proyectos estructurales -entregados por varias fuentes a Valora Analitik– revela una realidad menos optimista: el sistema eléctrico colombiano enfrenta una crisis de confiabilidad que se agrava, impulsada por la lenta entrada de los megaproyectos y una estrategia de conteo que, presuntamente, inflaría artificialmente los logros.
Las alertas provienen de múltiples actores del sector, incluyendo cifras oficiales de XM (el operador del mercado) y la UPME (Unidad de Planeación Minero-Energética), que muestran que el país está en un camino riesgoso hacia un déficit de energía firme.
La incumplida promesa del Plan de Desarrollo
La primera fisura en el discurso gubernamental se encuentra en el incumplimiento de la meta de capacidad en operación comercial establecida en el Plan Nacional de Desarrollo (PND).
La meta fijada era ambiciosa: el país debía agregar 2.000 MW de capacidad en operación comercial de generación eléctrica a partir de Fuentes No Convencionales de Energía Renovable (FNCER).

No obstante, la realidad, a corte del 20 de octubre de 2025, dista de alcanzar ese objetivo. Los datos desagregados, que separan la capacidad en función de su estado (trámite, operación o pruebas), demuestran que la capacidad real en operación comercial es de solo 1.749,02 megavatios (MW), y esto teniendo en cuenta los proyectos desde 2018, no desde agosto de 2022.

Imagen: Cifras desde 2018: proyectos conectados al Sistema Interconectado Nacional (SIN). Datos entregados por una fuente a Valora Analitik, basada en datos de XM.

Imagen: Cifras desde 2023: proyectos conectados al Sistema Interconectado Nacional (SIN). Datos entregados por una fuente a Valora Analitik, basada en datos de XM.
Aunque la suma total, incluyendo los proyectos que están en pruebas (1.049,969 MW), se acerca a los 3 GW (alcanzando 2.825,591 MW), los proyectos en esta categoría aún no son considerados legalmente como capacidad disponible para el mercado, por lo que su inclusión para justificar el cumplimiento de la meta del PND resulta cuestionable, de acuerdo con los expertos.
De hecho, las mismas cifras del Plan 6GW Plus –en el micrositio de la UPME-, se evidencia que Colombia suma 2.981,99 MW de capacidad instalada, de los cuales 1.922 MW están en operación y 1.059 MW en fase de pruebas.

Imagen: UPME – Simec – Plan GWPlus
La mayor parte corresponde a proyectos solares (más de 2.900 MW), mientras que la energía eólica y las pequeñas centrales hidroeléctricas (PCH) comienzan a consolidarse.

Imagen: UPME – Simec – Plan GWPlus
¿La trampa de la autogeneración? Miles de paneles solares en el conteo
El factor decisivo para haber alcanzado y superado la barrera de los 3 GW es la inclusión de miles de proyectos de autogeneración a pequeña escala y a pequeña escala aislada, una práctica que, si bien es legal bajo las normativas actuales, distorsiona la capacidad real de soporte del sistema.
De los cerca de 14.000 proyectos que componen la cifra oficial, el 90 % de la capacidad total proviene de un grupo reducido (cerca de 100 proyectos grandes), mientras que los más de 13.000 restantes son paneles solares instalados en residencias, fincas y pequeños comercios.
La UPME ha admitido que el listado oficial incluya desde grandes autogeneradores hasta instalaciones individuales, que en las cuentas de la entidad los proyectos salen con nombres como: Casa Luz Elena Marzola Castro, Finca Francisco Duque o Casa Tatis.

Imagen: Tomada del listado de proyectos de la UPME – Simec – Plan GWPlus
Así las cosas y según los expertos, este agregado de proyectos unitarios no representaría una capacidad gestionable ni suficiente para atender la demanda crítica de Colombia. En términos de control de riesgo, la suma de miles de pequeños paneles no equivale a un megaproyecto de gran escala.
También hay que decir que, de acuerdo con la UPME, dentro de los 3GW se están contando proyectos de autogeneración aislada -que no entran al sistema, pero que ayudan a descargar al mismo- como los desarrollados por Ecopetrol. De estos proyectos no se lleva registro en XM.
Vale decir que, de los casi 14.000 proyectos contados por la Unidad de Planeación, unos 300 MW son de ese tipo de iniciativas.
El peligro de la intermitencia: grandes proyectos en el limbo
Mientras el gobierno Petro enfoca su mensaje en el volumen total, los verdaderos proyectos estructurales que deben aportar la energía a gran escala para sostener la demanda nacional siguen estancados.
Los proyectos de energía eólica son el ejemplo más crítico. Muchos de ellos, vitales para el futuro del mix energético, siguen sin entrar en operación comercial, sin finalizar su construcción y, en muchos casos, enfrentando graves problemas sociales y ambientales que detienen su avance.
Esta inercia en la entrada de los proyectos de gran escala es el factor que realmente genera incertidumbre entre los inversionistas y operadores del mercado.
La capacidad en pruebas y en trámite (que suman 1.076 MW en la tabla), si bien existen en el papel, no son una garantía operativa y no pueden ser convocadas para responder a una crisis de demanda.
La preocupación se agrava al revisar la baja tasa de cumplimiento en la entrada de energía esperada al sistema en los últimos años, un indicador de la falta de confianza del sector privado debido a los cambios regulatorios y la incertidumbre en las reglas de juego.
Las cifras de XM, que han sido constantemente citadas por líderes del gremio, muestran que los compromisos de entrada de energía han sido sistemáticamente incumplidos:
- 2021: Ingresó el 7 % de la energía esperada
- 2022: Ingresó el 28 % de la energía esperada
- 2023: Ingresó el 17 % de la energía esperada
- 2024: Ingresó el 25 % de la energía esperada
- 2025: Ha ingresado menos del 2 % de la energía esperada
Según una fuente a Valora Analitik que ha pedido no ser citada, el caso que se presenta durante este año muestra señales de alarma que trascienden el debate sobre los renovables.
“Es una falla en la planeación y la gestión de la inversión energética que, en un escenario de Fenómeno de El Niño severo o retrasos continuos, podría traducirse en un riesgo real de racionamiento o apagones para el país en los próximos años”, indicó.
Y agregó que “el ruido de los 3 GW, en este contexto, es un velo que oculta la urgencia de fortalecer la energía firme”.
Listado completo de proyectos solares en XM
Sin respaldo en la hora crítica: el déficit de energía firme
La principal debilidad de un sistema basado en fuentes intermitentes se manifiesta en las horas pico de demanda, que en Colombia suelen ser entre las 6 p.m. y 9 p.m. En esos momentos, la generación solar es nula y la eólica podría no ser insuficiente.
Esta vulnerabilidad se traduce en una alarma por la Energía Firme del Cargo (Enficc), que es la energía que una planta puede comprometerse a entregar al sistema bajo las condiciones más adversas, incluyendo un Fenómeno de El Niño severo. Es el indicador clave de la confiabilidad del sistema.
Históricamente, Colombia mantenía un «colchón» de energía firme de alrededor del 10 % al 12 % sobre la demanda para garantizar la estabilidad. No obstante, las proyecciones de XM muestran que ese colchón se ha agotado y el país ya está entrando en una zona de déficit.

Un déficit de -1,6 % en 2025 significa que el país ya no tiene un margen de seguridad ante un mantenimiento no programado o una contingencia climática.
Para suplir esta brecha, se necesitan proyectos de almacenamiento en baterías, que todavía están ‘en veremos’ o más proyectos de energía firme, como hidroeléctricas y térmicas, que históricamente han sido el soporte del sistema.
¿Qué dice el Gobierno Nacional?
El Gobierno Nacional asegura que, en menos de tres años, el país pasó de tener menos del 2 % a casi el 14 % de generación limpia, marcando un salto histórico hacia la sostenibilidad.
Este avance, en línea con el Ejecutivo, es resultado del Plan 6GW Plus, la estrategia del Gobierno Nacional que busca incorporar 6 gigavatios (GW) de energías renovables no convencionales al sistema eléctrico colombiano antes de 2026.
“Pasar del 2 % que encontramos en 2022 a más del 13% en 2025 es un salto cuantitativo y cualitativo, porque diversifica la matriz energética. Estamos dejando atrás el uso intensivo de combustibles fósiles y reafirmando el compromiso del Gobierno del presidente Gustavo Petro con la lucha contra el cambio climático”, señaló el ministro de Minas y Energía, Edwin Palma Egea.
Este crecimiento ha sido posible, dice el Ejecutivo, tras a una nueva arquitectura regulatoria y técnica, con medidas como:
- Decreto 1033 de 2025 (LASolar) del Ministerio de Ambiente, que reduce hasta en 70 % los tiempos de aprobación de licencias para plantas solares entre 10 y 100 MW.
- Resolución 701095 de 2025 (CREG), en consulta, que permitirá liberar más de 2 GW en puntos de conexión, priorizando los proyectos con viabilidad técnica real.
Acciones estratégicas del Plan 6GW Plus
El plan combina acciones estratégicas y complementarias que facilitan la ejecución de los proyectos en todo el país. Entre ellas destacan subastas de largo plazo y esquemas de viabilidad financiera, así como cuerdos especiales de generación en La Guajira.
Igualmente, hay iniciativas para agilizar procesos regulatorios y está el programa Colombia Solar, que convierte subsidios eléctricos en paneles solares para hogares de estratos 1, 2 y 3.
Sumado a lo anterior, el Ejecutivo prevé unas acciones complementarias:
- Entrada a pruebas y rondas de negocio FNCER.
- Planes de descarbonización de la matriz energética.
- Autogeneración a gran escala y gestión de alto nivel para energías limpias.
El Ministerio de Minas y Energía resaltó que, en 2022, las energías limpias representaban menos del 2 % del total nacional. Pero, a octubre de 2025, alcanzan el 13,87 %, diversificando la estructura energética del país, que ahora se compone en 58,59 % de fuentes hídricas, 27,54 % térmicas y 13,87 % limpias.
El objetivo del Gobierno es llegar a 6 GW instalados para 2026, una meta que, con todo lo expuesto previamente, los expertos ven difícil de concretar viendo el poco tiempo que queda de la administración Petro.




