El próximo presidente ejecutivo del banco de desarrollo de América Latina (CAF) Sergio Díaz-Granados, priorizará el análisis del tema sanitario, el trabajo con los gobiernos para dar estabilidad a la deuda de los países y el financiamiento al sector privado en busca de proyectos para el desarrollo.
Así lo detalló Díaz-Granados en una conversación con Valora Analitik, en la que apuntó que la situación sanitaria de América Latina sobre el Covid-19 es heterogénea y que esa disparidad en las cuestiones de salud pública genera un riesgo para la región.
“Debemos pensar en la reactivación y esto tiene dos ramas: primero, trabajar con gobiernos para mejorar la estabilidad de la deuda; segundo, acompañarlos en sus esfuerzos de reformas fiscales”, apuntó el próximo presidente ejecutivo de la CAF.
Los socios del banco analizan cómo aumentar el financiamiento al desarrollo a través del sector privado, con soluciones basadas en el mercado, en un contexto en el que se agota el margen de maniobra de los gobiernos con niveles de endeudamiento amplios.
Esto, en palabras de Díaz-Granados, tiene dos formas de hacerse: con los traslados de balance, como se viene haciendo en CAF, o ejecutarlo por fuera de la hoja de balance, que es lo que ha hecho el Banco Mundial hace muchos años y lo que hizo recientemente el BID Invest. Ese será uno de los puntos a revisar cuando tome posesión del cargo, el primero de septiembre.
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El colombiano buscará dinamizar las inversiones para tener más financiamiento al sector privado, lo que permitiría a las empresas asumir más responsabilidad en el desarrollo de la región. La CAF cuenta con aprobaciones anuales de presupuesto que superan los US$14.000 millones.
La recuperación económica, según Díaz-Granados
Consultado sobre cómo ve el panorama en la región, el próximo presidente ejecutivo de la CAF resaltó que existe el riesgo de confundir un efecto rebote con la reactivación de América Latina.
“En el caso de Colombia hay unas bases sólidas. La clave está en hacer una muy buena coordinación con el resto de países de la región. Hay que volcarse a dinamizar el sector exportador y agregar más capacidad de consumo al país”, apuntó.
Díaz-Granados ve señales positivas de recuperación y considera relevante conseguir que esta se dé de una forma homogénea en la región. “Mi compromiso con el directorio es llegar con una propuesta de cómo financiar más al sector privado. Hay una urgencia de generar más renta fiscal y esto va a requerir que haya más inversión privada. Hay sectores que van a jalonar esa inversión”, concluyó.
CAF comenzó a operar en 1970. Con una historia de 31 años, la institución ha aprobado más de US$200.000 millones en financiación dirigida a los proyectos de los países de América Latina.
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