El Índice de Percepción de Confianza en Chile (Ipeco), realizado por la Universidad del Desarrollo, registró un retroceso de 18,6 puntos en abril y se ubicó en 49,6 puntos, manteniéndose en el grado “extremadamente pesimista”, el segundo peor registro histórico de la medición.
De acuerdo con los analistas, el rápido deterioro de la situación económica del país, producto de la crisis del coronavirus tiene a los consumidores en los niveles más pesimistas desde que hay registro y solo comparable con las secuelas que dejó la crisis social de octubre pasado.
La mayor diferencia entre lo que se vivía en los últimos meses del año pasado y lo que se registra ahora, es que en abril se ve también un fuerte deterioro de la situación presente, sumado al impacto en la evaluación sobre el futuro, que se evidenció tras el 18-O (protestas sociales).
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Así, la confianza en la actualidad (índice coyuntural) disminuyó de forma aguda (74,5 puntos), llegando a 32,8 puntos, pasando del nivel “moderadamente pesimista” al “extraordinariamente pesimista”.
Por su parte, la confianza en el futuro (índice de expectativas) aumentó marginalmente (1,7 puntos), aunque se mantuvo también en el nivel “extraordinariamente pesimista”.
Por otra parte, la percepción del desempleo actual disminuyó en 59,3 puntos; hasta 40,1, pasando del nivel “pesimista” al “muy pesimista”. Este es el menor nivel de esa variable desde febrero de 2016, y se enmarca en un escenario laboral en el que han ido aumentando los despidos, reducido las nuevas ofertas laborales y suspendido miles de puestos de trabajo debido a la pandemia.
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La percepción sobre el empleo también está en línea con el aumento de personas que están saliendo de la fuerza laboral, pero que volverían inmediatamente de saber que tendrán un empleo. Estos “desalentados” subieron 63 % en el último año, de acuerdo con las cifras de la encuesta de Empleo del Instituto Nacional de Estadística (INE).
La percepción de la situación económica futura avanzó 13,2 puntos, aunque manteniéndose en el nivel “extraordinariamente pesimista”. Este leve avance puede relacionarse a las expectativas del mercado, que ven que el próximo año habría un fuerte repunte de la economía, tras la caída que se espera para el presente año.
(Con información de La Tercera)
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